En esta semana he visto 33 el Musical, una obra musical que está teniendo una critica muy buena, teniendo en cuenta que es una historia de tipo religioso y teológico. Pero hay un sector que no ve bien y con buenos ojos este musical tan moderno.
No es una critica a la puesta en escena a los técnicos de producción, diseño escenográfico o cualquier otro tipo de critica sobre los actores. Las personas que critican esta obra se queja más bien por la letra de ciertas canciones. Pongo un ejemplo, esta es una canción entre otras, escribo una parte de la letra o estribillo del titulo " Religión oficial"
".... los sacerdotes lo tenemos todo claro. Dios nos ha dicho cuál será su voluntad....... rezando no hay que hablar, aportar en la colecta, en la hucha tu dinero tu dinero, no hay que ser egoísta al clero has de ayudar "....
Una parte del sector que está molesto pertenece a la jerarquía católica apostólica romana. Tengo entendido que el clero Episcopal está apoyando este musical, y al mismo tiempo los más críticos no son los escépticos, incrédulos o los irreligiosos, sino críticos de la censura detractora que pertenecen mayormente a una parte de los órganos de las congregaciones perteneciente a la curia romana.
Esta obra musical catalogada por algunos "no apta " para católicos, está emocionando a todo tipos y clases de personas, creyentes o no creyentes, jóvenes, adolescentes de colegios católicos. Estos jóvenes vienen incluso fuera de Madrid con entradas reducidas en el precio. La cuestión es que en el escenario del musical, los personajes que representan a los sacerdotes judíos de aquella época y los sacerdotes católicos modernos se ven reflejado en este musical. No sé porqué los críticos dicen que la iglesia católica se siente atacada pues, la obra musical es precisamente de un sacerdote y compositor de la compañía o cofradía de los Salesianos.
Merece la pena ver este musical, podéis buscar y leer más opiniones en las redes sociales. Es una forma distinta y diferente de oír y ver el mensaje del mejor y mayor "influencer" de la historia, Jesús de Nazaret. La emoción y los sentimientos se entrelazan con la alegría y el entusiasmos de los actores y el publico lo tienes asegurado.
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